El lunes 25 de enero el judo español amanecía con la triste noticia del fallecimiento en Madrid a los 80 años edad de Francisco Valcárcel.

Valcárcel había ejercido como vicepresidente primero de la Real Federación Española de Judo y Deportes Asociados desde 1988 hasta la actualidad, labor que había compatibilizado con su presidencia en la Federación Madrileña de Judo y Deportes Asociados a la que accedió en 1982 y de la que en la actualidad era presidente de honor.

Con un extenso y brillante currículum, Paco como así lo conocían todos, comenzó a colaborar en 1984 con la Federación española como director técnico, cargo que ejerció hasta 1988 cuando además de acceder a la vicepresidencia primera de la misma se convierte en Director Deportivo, asumiendo así la máxima responsabilidad en este área, en la cual consiguió grandes éxitos como las primeras medallas olímpicas del Judo español, con los Oros de Miriam Blasco y Almudena Muñoz en Barcelona 92, a los que siguieron otros grandes éxitos a nivel Internacional no solo en el Judo sino también en los Deportes Asociados.

Su aportación al judo nacional ha sido fundamental con numerosos proyectos y programas enfocados a la iniciación del judo e igualmente esencial lo ha sido al judo y al deporte madrileño consiguiendo entre otras cosas  en 2010 y bajo su presidencia en la Federación Madrileña la puesta en funcionamiento del Centro especializado de Tecnificación deportiva de Judo y Deportes Asociados en Villaviciosa de Odón, sede ahora no solo de actividades propias sino también de multitud de competiciones, cursos y entrenamientos a nivel nacional e internacional.

En Abril de 2009 ingresó en la Real Orden del Mérito Deportivo, en la categoría de Medalla de Bronce, en reconocimiento a su trayectoria deportiva y profesional y a finales de  2015 durante la Gala de premios y recompensas de la RFEJYDA  Paco recibía de manos de Juan Carlos Barcos, presidente de la RFEJYDA y Alejandro Blanco, presidente del COE y bajo el aplauso y cariño de todos los allí presentes el cinturón negro 9º Dan, formando parte así de la elitista lista de maestros que en España tienen este reconocimiento.

Fue dedicación, esfuerzo, pasión, entre otras muchas cosas y se ha marchado sobre todo con el respeto y agradecimiento de su entrega a nuestro deporte. Si hay una frase que puede resumir la vida de Paco es  el título del libro sobre él escrito por Oscar Martin y Jesús Fuentes, “Una vida por y para el judo”.